
De acuerdo con ingenieros de telecomunicaciones en China, el servicio comercial de esta nueva red llegará a fines de la siguiente década con tasas de transferencia de hasta 1Tbps.
Mientras tu smartphone va cambiando entre conexión 3G, H+ y 4.5G, en China ya están hablando del 6G y la evolución que implicará este sistema de telecomunicaciones en todo el mundo. Ha sido Su Xin, líder del proyecto de trabajo del 5G en el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información para China, quien ha anunciado en Beijing que ya iniciaron las pruebas con la nueva red desde inicios de este año, pero que la aplicación comercial podrá desplegarse a finales de la década siguiente.
El primer gran cambio en la red será la velocidad de transferencia. Según las primeras pruebas, se logran tasas de 1 Tbps, hasta 1000 veces más veloz de lo que actualmente logran servicios como Google Fiber. La autoridad china ha mencionado que esta red será “el fin de las redes G” porque se espera varias tecnologías diferentes que soporten comunicaciones inalámbricas y otros dispositivos a futuro que permita mayor nivel de transferencia de datos.
Para entender el gran impacto en la nueva red, Su Xin explicó que “el 5G tiene tres escenarios en donde se aplica: más ancho de banda, menos latencia y amplia conectividad. El 6G podría mejorar estos tres escenarios sin problemas”. Parte del objetivo chino es posicionarse como el referente global en redes 5G impulsada por el gobierno, la presencia de marcas como Huawei, y la necesidad de las operadoras móviles por añadir capacidad adicional para satisfacer el flujo de datos.
China no es la única que persigue este propósito. Las autoridades de Japón creen que esa tecnología estará disponible para 2030 y quieren ser líderes. Japón es una de las naciones mejor preparadas para el 5G, pero está detrás de Estados Unidos y Corea del Sur hoy en día.
Como todo el mundo Japón está trabajando para poner en funcionamiento sus redes 5G. Aunque se espera que para 2025 sea junto a Estados Unidos y Corea del Sur uno de los países con mayor desarrollo en este área, por el momento se encuentra algo retrasado respecto a estos otros dos países. Sin embargo siendo Japón como es ya ha comenzado a hacer planes para el próximo salto de calidad en las redes de comunicaciones móviles. El 6G, que podría llegar en 2030, ya está en la mesa de Ministro de Comunicaciones, Sanae Takaichi.
Pensando en el futuro, la idea del gobierno es armar una estrategia que abarque cuestiones tales como el desarrollo tecnológico, usos, métodos y políticas.
Takaichi, ha señalado al respecto: “Una introducción bien llevada a cabo de los estándares para las próximas redes de comunicaciones es indispensable para mejorar la competitividad internacional de Japón”.
En otras palabras, a las autoridades no les ha gustado nada que Japón esté detrás de otras naciones en este aspecto clave de la innovación tecnológica y creen que esto ha sucedido por una falta de preparación. En efecto, los servicios comerciales en Japón no estarán entre los primeros, pero se espera que comiencen a funcionar a mediados de 2020. Cabe recordar que las olimpiadas de Tokio comenzarán en agosto de este año, lo que sin dudas supone algo de presión extra.
Por supuesto, el 6G es todavía una especulación basada en los ciclos de cambio de tecnología que se han producido en el sector mobile. La principal empresa de telecomunicaciones de Japón, NTT DoCoMo, cree que cada 10 años se produce un cambio generacional, mientras que el modelo de negocio se modifica cada 20. NTT DoCoMo publicó hace relativamente poco un documento con detalles sobre cómo cree que será la evolución del 5G al 6G.